sábado, 26 de marzo de 2016

Rescribiendo los 26.....

Hace mucho, demasiado tiempo que no me siento a escribir. Siento que tal vez he olvidado ciertas cosas, que tal vez no me puedo comunicar con la misma naturalidad que antes solía hacerlo cuando me sentaba frente a un teclado.  Sin embargo necesito intentar decirte algo.

Sabes que para mí los días como hoy no eran fechas fáciles, porque de alguna manera me recordaban lo doloroso que puede ser el desamor, la falta de consideración, como puedes llegar a sentirte infravalorado, no respetado, olvidado, o en palabras más sencillas simplemente echado a perder. Sabes también que cuando empecé a hablarte de “amor”, de “cariño”, cuando quise que sacaras esa barrera de amistad que había entre tú y yo, lo hice siempre cuidando que quede claro que yo no buscaba algo más, algo planeado, algo proyectado. Y tal vez intente jugar con tu mente y tal vez pude presentarme como lo que querías que me presente buscando así que puedas aceptar mi manera de ver las cosas. Hoy no tengo más términos ni condiciones que presentar, hoy los rebatiste todos.

Hoy, aun hoy después de 30 días a tu lado tengo unas cuantas cosas que decirte. Primero que todo gracias, gracias por ser tu pero mucho más importante que eso gracias por dejar que lo descubra, por dejar que llegue a lugares de tu mente donde casi nadie ha llegado, por darme miradas en las que me podría ahogar, por darme sonrisas que no quisiera que se acaben. Gracias por reescribir sin querer conmigo esta fecha y corroborar mi fe de que efectivamente la vida se encarga muchas veces de enderezar las cosas en formas y maneras completamente inesperadas. Gracias por ser tu, tan igual a mí y tan diferente a la vez en tantas cosas porque me enseñas que se puede querer de mil maneras distintas y que aun así puede y debe ser espectacular.

Te lo dije al principio, y te lo repito hoy. No le tengo miedo al dolor, si el camino a ese dolor pasa por tus manos, tus abrazos, tu sonrisa, tu manera de quererme tan sincera, tu inocencia, tu inexperiencia, esa manera en la que caes voluntariamente en mis juegos sabiendo muy dentro de ti que podrías zafarte de ellos, pero no quieres. La vida nos pone siempre en el lugar correcto, y no se por cuanto, ni para que, ni porque, pero hoy tu eres el lugar en donde quiero estar. Hoy quiero descansar en tu sombra, hoy no quiero nada más. Te admiro y te quiero por todo lo que eres, una gran hija, la mejor profesional, una buena hermana, una amiga siempre lista, una chica sencilla, una tía chocha, y para mí una gran compañía. Y esa admiración es la que me hace darme cuenta que ese 26 rescribí la historia y elegí bien.

Los días seguirán su paso, y ciertamente no sé lo que vendrá en el camino para ti ni para mí. Solo sé que a donde quiera que nos lleve siempre recordare que un día me miraste así, que hubieron días que no podía despegarme de ti, y que hubo un tiempo en el que no había nada mejor que eso. Katy, gracias otra vez por ti y por la nueva tinta con la que rescribo los 26, una nueva, una mejor, una indeleble. Te quiero gorda.


PD: Feliz 26!

martes, 14 de febrero de 2012

Familiarmente Natural

Como una inyección de ganas, eso son ustedes en mi vida. Como una droga inmaterial que me llena y me reconforta. Con ustedes no tengo miedo de ser quien soy, los defectos no los escondo y mis sonrisas no son sonrisas “para la foto”. Con ustedes los insultos no hieren, las verdades no duelen y las mentiras no matan porque no hay mentiras que esconder.

Son una de las cosas más grandes que la vida me ha dado y solo la misma vida sabe porque no estamos lo cerca que quisiéramos el uno del otro, pero es la misma vida la que sin que nos lo propongamos nos regala días y momentos tan valiosos como los que nos ha tocado vivir en este último mes y más intensamente en esta última semana.

Agradezco profundamente cada día que he podido pasar a su lado, cada momento, cada risa, cada caricia, cada beso, cada mirada, cada renegada, cada papelón en la calle, cada palabra que pude escuchar directamente de sus bocas. Creo que saben lo importante que son para mí y si no lo saben se los digo ahora y son así de importantes porque el lazo que tenemos nosotros es tan grande y tan lindo porque muchas otras familias en nuestra situación se hubieran separado terminando por hablarse de vez en cuando y no importando mucho si es que había oportunidad de juntarse o no, siendo unos perfectos desconocidos que se ven una vez cada año, o cada dos. Pero nosotros no, nosotros nos preocupamos el uno por el otro diariamente. Tenemos nuestras prioridades y tareas diarias pero estoy seguro que en algún momento del día pensamos en nosotros y en como estaremos y deseamos que todo esté bien, particularmente yo siempre lo hago no tengo un momento particular en el día para hacerlo pero siempre lo hago al menos una vez.

Con mi familia por parte de mamá las cosas nunca han podido ser así porque existe demasiada mala fe y envidia de por medio y cuando nos veo a nosotros no entiendo el porqué todas esas cosas se dan por el otro lado.

Esto no es algo muy largo porque no quiero aburrirlos ni aburrir a nadie que pueda leer esto, pero solo escribía para decirles que los amo mucho, que son mi razón para seguir todos los días, que vivo y lucho diariamente con la esperanza que días como los que hemos pasado se puedan repetir y sé que será así porque me lo he propuesto. Que siempre van a poder contar conmigo para lo que sea y que espero verlos muy pronto otra vez, que la vida nos regale esa oportunidad de abrazarnos otra vez, fuerte muy fuerte. Porque con ustedes el cariño sale a flor de piel y es algo natural, familiarmente natural.

domingo, 1 de enero de 2012

Adios 2011.

Adios 2011. Hace un año empecé a escribir en este blog que me ha traído pequeñas pero significativas satisfacciones y lo empecé con un post que hablaba un poco de empezar nuevas cosas en un año nuevo, de borrar lo del pasado año y pedir solo cosas buenas para el año que venga.

Y este año 2011 no ha sido precisamente el año de las “cosas buenas” , tampoco es que haya tenido solo cosas malas pero ese es exactamente el punto al que quiero llegar. Me di cuenta que pedir cosas buenas y esperar que los años que empiezan sean así de “perfectos” es un poco ingenuo  - y con eso no quiero ser matailusiones- porque pues ¿Qué cosa es perfecta? Ninguna!.

El año así como las personas y las cosas va a tener cosas buenas y malas y el punto asumo yo, está en disfrutar las buenas a morir y aprender de las malas. No preguntarse el porqué de las cosas sino el “para que”. Porque es mucho más fácil pensar que todo sucede no por algo sino “para” algo, es más fácil encontrar la consecuencia que la causa. Por ejemplo algo sucede para que aprendamos algo, para que nos hagamos más fuertes, para que recordemos algo que nuestra alma en el camino olvidó. 

Haciendo un resumen de mí año pues en lo laboral conseguí un trabajo que estuve luchando harto. En el ámbito académico Por fin me gradué y tuve mi ceremonia que fue un momento que esperé por largo tiempo, más que nada porque quería que mis viejos me puedan ver en ese momento y, diré que ver sus caras de orgullo ese día fue algo invaluable para mí, tal vez eso fue lo mejor del año.

Mi ámbito personal estuvo un poco más golpeado este año. Mi abuelito querido tuvo que partir después de largos 90 años de vida y 23 de ellos dedicados a mí. Fue un momento durísimo no solo por el dolor de la partida sino por el hecho de ver a mi mamá muy golpeada y triste. Pero agradezco el tiempo que la vida me lo presto, fue el mejor abuelo del mundo.  Por otro lado, conocí a una persona que pensé era especial y buena y he de decir con la joda de saberme en yerro que me equivoque de la peor manera. Resultó ser una persona sin escrúpulos para mentir ni para usar a la gente pero lamentablemente no le puedo echar toda la culpa a ella porque yo también pequé de negligente al ignorar todos los defectos que me daba cuenta que tenía, probablemente como dicen cuando uno está enamorado se ciega. A la vez al descubrir mi error con esa persona lo descubrí con otra persona, al que yo consideraba de mis mejores amigos. Un “broder” con quien había compartido largos fines de semana de trago inacabable, charlas de la vida con un par chelas en mano, decepciones, logros, estudios, momentos familiares. Por todo eso jamás esperaba una agresión o un daño de su parte pero bueno, llegó. Y con eso me di cuenta que había estado jodidamente equivocado y que él nunca me considero en verdad su amigo, que nunca tuvo lealtad conmigo y que probablemente no la tenga con nadie. Probablemente es feo perder a la chica de la que estas enamorado y probablemente es feo perder a un amigo o un “mejor amigo” pero perder las dos cosas a la vez es en verdad desconcertante, lo puedo decir. Con lo que paso pensé hasta en empezar a desconfiar de todo el mundo, pensé que ya no podía confiar en ninguna mujer que diga estar enamorada ni tampoco en ningún amigo que jure lealtades a morir. Hoy sé que no es el camino pero no puedo decir cual sí es. Lo único que sé ahora es que hay lobas con disfraces de corderos y falsos amigos en todos lados y hay que ser mucho más cuidadoso con eso.

De lo bueno, este 2011 ha sido el año para ver a muchas personas importantes que están lejos. Un par de amigos del colegio que están lejos hace mucho, vinieron de visita y no he perdí la oportunidad de verlos. Mi familia que está en Chile también vinó. También un par de familias muy importantes para mi se acercaron pues se mudaron a mi distrito, ahora es mucho más fácil verlos y podré hacerlo más seguido. Me refiero a la familia de mi hermano Andreí y a la familia de mi mejor amiga Gabriela. Me alegra mucho que estén cerca.
Una de las mejores cosas para mi personalidad enamorada de la música de este año fue el poder ver a una leyenda de la música en vivo en un escenario. Me refiero al gran Paul McCartney, definitivamente el mejor show del año y probablemente uno de los mejores de mi vida. Escuché canciones míticas con una onda espectacular como “A day in life” escuchar esa canción en vivo de la voz de uno de los que la compuso es otra cosa.

En fin, si tengo que hacer un balance de este año que pasó, la verdad no podría etiquetarlo ni como bueno, ni como malo. Creo que tuvo cosas espectaculares y pruebas que he tenido que superar pero si tengo en cuenta que de todo he aprendido tal vez eso inclina un poco la balanza.

Esta vez no pediré que este 2012 sea excelente y que todo sea felicidad porque como dije arriba sería una petición inútil. Pediré aprender a ser feliz con todo lo que pasé, disfrutar a morir las cosas buenas, ignorar las cosas malas, alegrarme y enorgullecerme de mis logros, luchar contra mis frustraciones, elegir bien a las personas a las que les doy mi confianza, cariño y las hago parte de mi vida y sacar de mi vida a quienes no merecen estar en ella. Aprender a reconocer cuando me están dando amor en vez de cuando solo me están dando migajas. Y aprender a dar amor a montones no solamente a la persona especial sino a todo el mundo que lo necesite y lo merezca. Y es lo mismo que deseo para todos, hagan sus sueños realidad, sonrían todos los días, hagan cosas que los apasionen este 2012 aparte de sus estudios o trabajos. Y sean felices. Gracias por todo. 

jueves, 15 de diciembre de 2011

Despues del infierno....

Hoy voy caminando otra vez en el viento, en las aguas, en la tierra en todos los elementos.
Renazco de las cenizas en donde me dejó aquel fuego hirviente, pero las cicatrices no se van. Abro los ojos, respiro nuevamente, aire fresco, aire limpio, pero las cicatrices no se van.
 
Me muevo lentamente, estiro mis músculos, miro a mi alrededor, pero el miedo no se va.
Sonrió como una mueca, como un gesto disforzado, la confianza quiere llevarme, pero el miedo no se va. Reviso en el fondo de mi alma, en los planos más escondidos y sigue ahí todo el dolor, toda la mierda. Cuánto daño hacen las palabras, cuanta desolación dejan las promesas rotas, las mentiras calculadas.
 
No se trata de las defensas que regale, no se trata de las armas que entregué en mi capitulación.
Se trata de aquel juego inhumano, en el que una apariencia pesa más que una verdad.
Se trata de la irresponsabilidad de la persona que dispara la bala, de la cobardía o incapacidad de aceptar un error. Se trata de aquella ligereza asesina de los juramentos eternos en donde la eternidad dura lo que duran los encuentros. En donde el amor y la pasión no se diferencian, y en su intempestad se llevan a todo a su paso.

No se trata de lo que dije o hice mal, no se trata de mis errores o mis omisiones. Se trata de la frivolidad de un mundo donde la humildad no encaja, donde la posición y el dinero mandan. Se trata de la falsa moral, la falsa fe y las falsas oraciones, de la hipocresía hasta con Dios. Se trata de las ganas de dañar, del desquite del destino, de cobrarse con alguien más lo que la vida te hace.

Quien te prometa que jamás te hará daño, es quien más daño te hará porque quien no tenga intenciones de hacerte daño no necesita de promesas ni juramentos para probártelo ni para convencerse de aquello, necesita de sus acciones que deberian evitar las heridas del alma. Las heridas del alma indudablemente son incurables, no dejan nunca de sangrar ni de filtrar la materia del dolor, la frustración o la pena.  La profundidad y el daño de una traición es proporcional a cuanto querías o amabas a la persona que lo hace.

Y las cicatrices no se van, y el miedo no se va, y las decisiones por mucho que duelan se tienen que respetar porque la vida se reduce a eso, a las decisiones que tomas y en como estas afectan el futuro y el de las personas que caminan a tu lado y en cuanto bien o cuanto daño hacen esas decisiones. Y mi decisión es seguir adelante, porque si el miedo sigue aquí y las cicatrices no se borran, la esperanza tampoco, MI esperanza tampoco.





Esta canción siempre me levanta el animo y me devuelve un poco la esperanza. Funca.

martes, 29 de noviembre de 2011

Lo frágil de la locura....

La locura es frágil, la locura es simple. Ser loco es más fácil, más divertido, más versátil. La locura te da infinitas posibilidades, te da infinitas reacciones, con ella no necesitas de los demás pues los demás siempre están contigo.

Intento ser un demente porque la cordura me enferma, las posturas correctas y las respuestas cantadas para satisfacer lo que otros buscan de mí, me hacen indigno y me hacen infiel a mí mismo, a mis creencias y a mis pasiones.

La locura es sincera, libre y sin parámetros. La locura no conoce de cárcel ni de recipiente que se adecue a su forma. La locura brilla en la oscuridad y se opaca en la claridad, va en contra de su entorno, nada río arriba.

Con la insania de mi lado puedo verte en cualquier momento, puedo hablarte y escucharte, decirte cosas que no diría en realidad pues  no preveo las consecuencias cuando estoy sometido a ella. Bajo los efectos de esta enfermedad suicida todas mis defensas bajan a su mínima expresión, la sinceridad domina mis palabras pero a la vez cualquier palabra por más mínima que sea su implicancia me puede destruir desde adentro, pero soy libre, soy autentico.

En el eje de esa locura intento tenerte muy cerca, intento retenerte cuando te desvaneces, cuando todos esos miedos invaden el infinito de mi mente.  Cuando todos los fragmentos de la memoria deciden repartirse desordenadamente, es ahí cuando los manotazos de ahogado aparecen para intentar retenerte.

En mis pupilas vacías las pinturas de tu cuerpo se dibujan entrecortadas. En mis oídos desvalidos, las canciones infinitas armadas con las notas de tu voz retumban como el rugir del león en el descampado africano. Esta fragilidad de la locura, esta relación dependiente con la cordura, esta muerte viviente, esta vida agonizante, este dolor punzante, esta soledad autentica, esta compañía falaz, estas lágrimas secas, estas sonrisas inundadas.

Si el mundo sigue girando y yo aun puedo despertar, si el infinito sigue mirando y las cascadas aun mantienen su caudal, yo no he de morir en la locura y la locura no ha de morir en mi pues en ella me reinventó y gracias a ella me convenzo que de locuras y de corduras vale la pena vivir.

lunes, 21 de noviembre de 2011

A la eterna rival....

Perder, ¿Qué es perder? Es no saber en donde esta algo que queremos o es saber que esta donde no lo encontraremos más? ¿Es ambas cosas?, y ¿por qué perder algo molesta? Porque sentimos una pena al saber a algo o a alguien perdido. Actuamos en perfección al querer tanto y al apegarnos o es una muestra más de lo defectuosa de nuestra naturaleza humana, el apego. Es acaso un efecto de creernos el cuento de que somos imagen y semejanza del creador y de que por tanto nos pertenece parte de la creación y más aun parte de la creación que nos rodea y nos acompaña? No termino de entender esta situación tan ambigua porque el entendimiento es algo que demora, pero a la vez tampoco termino de sentir el dolor provocado porque el sentimiento es algo instantáneo y eterno a la vez.

Ayer me encontré en una de esas ceremonias a la que tan acostumbrado me ha tenido el último año, una de esas en que las personas despiden a un ser querido. Lo despiden de este mundo y se “alegran” por su llegada al mundo prometido. Y pongo alegran entre comillas porque quien se alegre al 100% con pureza, sin tribulaciones ni sentimientos encontrados pues entonces tal vez si esta hecho más a semejanza del creador de lo que cree. Volví a ser obligado a presenciar el momento difícil, el momento del desapego, el momento de la separación, garrafal y súbito como quien te arranca un esparadrapo lleno de cera de algún lugar del cuerpo, como quien sin aviso y sin contemplaciones te inserta la jeringa en la vena sin siquiera contar hasta 3. La verdad yo no conocía al señor al que le toco partir, era el padre de un amigo de mi padre. Pero a pesar de no conocerlo, al momento de las despedidas de sus familiares y seres amados no pude soportar más y me quebré. Y entonces confirmé como lo reflexione en el entierro de Andreí, que no hay dolor más fuerte, más punzante, más hiriente y más contagioso que él que siente un padre que pierde un hijo o un hijo que pierde un padre. Supongo que porque o se pierde una parte que fue de uno o se pierde la fuente de la vida y aquel lazo debe ser más fuerte que cualquier cosa en este universo. De aquella ruptura nacen palabras de la boca tan cargadas de dolor, quejidos tan punzantes e intensos como un bebe que llora incansable y inconsolablemente porque se siente abandonado y desprotegido. Probablemente sea una de las pocas veces en las que el alma en verdad llora.

No pude soportarlo, él sentimiento que no era mío se apodero de mí, me invadió, me contagió, y desde adentro hacia afuera no solo hizo que sintiera en parte (una muy pequeña asumo) y aún asi terriblemente intenso, el dolor de aquella partida sino que también reviviera los dolores de las otras que me tocaron. Tal vez más que de dolor lloré de cólera, cólera por no poder hacer nada para remediar la manera en que el mundo, el universo funciona. De no poder erradicar a aquella agente encubierta por un manto sobrenatural que apaga toda luz y toda esperanza. De no poder devolver el tiempo pero estando enterado de sus visitas para esperarla preparado e intentar pelear por lo que considero en mi máxima estupidez, es mío. Pero, también escuche en aquellas despedidas muchos “Perdóname por aquella vez que…” o “Gracias por…” y decidí que no quiero que me llegue el último segundo sin haberle dicho a las personas que amo cuanto las amo y porqué, sin haberle pedido perdón a la gente a la que dañe con alevosía o con ignorancia de mis actos y sus consecuencias o sin haberle agradecido a quienes hicieron algo por mí con sus acciones, palabras o con simplemente su presencia en mi vida.

Si abrí este blog para hablar de la vida, no podría describirla completamente sin describir y hablar también de su némesis, de su contraparte perfecta.  Tu, mi eterna rival. Enemiga de la vida y del apego. ¿Quién te creo y con qué afán? Sinceramente no entiendo porque destruir lo que se siembra con tanto amor, lo que se riega con tanta dedicación y se cosecha con tanta esperanza. Aborrezco el día en que por primera vez decidiste seguir tu destino fatal, impartiendo dolor en cada uno de tus actos, dejando desolación por donde fuera que caminases.

Exijo que me digas donde es que secuestras esas almas, donde es que te guardas los sueños inconclusos y las ilusiones rotas. Exijo que me devuelvas lo que me quitaste, sin preguntar, sin pedir permiso, sin siquiera mandar un aviso. Cuéntame que ilógico algoritmo corres en tu cabeza, si es que la tienes, que te devuelve como resultado él cómo, él cuando y él donde. O eres más cruel de lo que pienso y eliges arbitrariamente? Te detienes un momento a pensar y como quien decide que quiere comer de postre eliges a tu siguiente visitado. Ya estoy cansado de ver todo lo que dejas atrás, sería estúpido pensar que conoces el remordimiento o que tienes conciencia.

Estoy harto de escuchar a la gente decir que eres natural. Que de natural puede tener oponerse de esa manera a la felicidad, a los sueños, a la continuidad? Solo te puedo decir que cuando vengas a visitarme no te la voy a poner tan fácil, tengo cosas por las que irme contigo se hace la elección que yo no haría. Tengo personas a las que no dejaría, sueños que valen la pena vivirlos 1000 años. Es probable que pierda contra ti, muy pocos te han ganado y los que lo han hecho solo han sido unos cuantos Rounds. Pero esperar a que vengas e irme voluntariamente bajo tu palabra sería renunciar a todas mis convicciones y deseos, y si es que me conoces sabrás que no renunció a nada. Te aborrezco y te aborreceré siempre ya sea porque conozco quien eres en verdad o porque lo ignoro completamente, si es así pues alguien debería darse el trabajo de explicarme que aquel trabajo no es el que elegiste por voluntad propia, que tu libre albedrio fue vulnerado y eres un esclavo más de un sistema al que tampoco sabes cómo llegaste. Sino pues en lo correcto están mis sentimientos, tal vez no mi entendimiento pero entonces tal vez te entienda cuando te vea cara a cara y digas mi nombre.


jueves, 10 de noviembre de 2011

Canción del día.... :)

Ya que no tengo facebook.... no me queda otra... que publicar la canción del día por aca. Espero que les guste. Habla de la vida, como este blog.