domingo, 12 de junio de 2016

3 días, 2 mundos, 1 amor....

En este momento después de pasar 3 días a tu lado., sentí la necesidad imperiosa de escribirte y contarte o describir todos los momentos que habíamos pasado para que no se te olviden pensando en que era la primera vez que tu pasabas un fin de semana con alguien y lejos de tu casa. Pensando tontamente que la única que había aprendido eras tú.

Sin embargo ahora mismo mientras te escribo se y entiendo que tal vez yo aprendí más que tu porque aprendí mucho de ti y te conocí más y eso es bueno para cualquiera que sea el caso.

Aprendí que eres muy indecisa, que el color de tus decisiones cambia y que depende mucho de las oportunidades que tienes y en qué momento las tienes.

Aprendí que tienes muchas historias que contar, y que muchas veces no me van a gustar esas historias y que me equivoco en eso pero que debo aprender a escucharlas
.
Entendí que es cierto que cualquier hombre ve lo que yo veo en ti y basado en eso entendí que las posibilidades para ti son infinitas y que yo soy una oportunidad más que para mi suerte fue bien aprovechada.

Entendí que yo nunca me curé, que me hirieron más de lo que yo creí y que es probable que mis heridas nunca terminen de supurar. Que esto no me va a dejar por mucho que quiera.

Entendí que tienes tanto miedo de fallar como yo, porque esto es en parte la manera en que te quieres probar que las heridas que te hicieron y sus posteriores efectos  no fueron graves, no fueron de muerte y que eres capaz de amar y sentir como cualquiera y te molesta fallar en eso.

Aprendí que cuando algo no te gusta cuando no te sientes cómoda y estas lejos de tu zona de confort situacional buscas algo que te haga sentir protegida, segura.

Entendí que los años que llevas sola te han llevado a ver la vida de esa manera. A entender que la felicidad no está en el otro sino en ti misma. Eso seguramente enamora a cualquiera, tal vez sin entenderlo totalmente es lo que me enamoro de ti porque así como la mujer se enamora del pendejo pensando que lo va a cambiar, el hombre se enamora de la independiente pensando que la va a atar. Lo que entendí este fin de semana es que eso no va a pasar, que tengo que dejar de esperar eso de ti.

Aprendí que por más que te quiero más que a nada todavía tengo vergüenza de algunas situaciones pero no porque no te tenga confianza sino porque siempre quiero quedar como el que todo lo hace bien. Tu puedes pensar que a estas alturas no debería haber vergüenza pero yo la tengo y tu también tienes algo más, lo que me lleva al siguiente punto.

Aprendí que te molesta que conozca tus defectos porque tienes miedo a que los exponga o a que te los recrimine alguna vez. Que a veces desearías que no te pudiera leer.

Entendí que por más que lo intentes de alguna manera siempre te sales del libreto siempre eres solo tú por un instante sin importar nadie más. Lo bueno es que aprendí que cuando ese momento acaba y necesitas regresar, siempre regresas a mí. Y por ahora, eso es lo mejor del mundo para mí.


Finalmente después de todo entendí que aún tenemos mucho por vivir y hoy más que nunca tengo claro que probablemente todas esas cosas que nos faltan no las vivamos juntos, pero hasta que tenga que ser y mientras que tenga que ser, por poco o por mucho seguirás siendo lo mejor de mi vida y seguiré aprendiendo y maravillándome día a día porque eres un mundo entero por descubrir, eres un mundo nuevo para amar.





miércoles, 25 de mayo de 2016

30 días de un 26....


Gorda:

Que puedo decir que no haya dicho ya? Dicen que el tiempo no puede ser medida de lo vivido pues un segundo puede marcarte la vida y un año entero puede no traerte ni arrebatarte nada. Realmente nunca me había puesto a analizar el significado de la frase y ahora que lo hago me doy cuenta que no hay nada más cierto. El tiempo no puede decirte nada, porque al final es solo una medida más que hace el ser humano para tratar de controlar de alguna manera algo que no entiende y sin embargo a la única cosa a la que aún el ser humano no le encuentra medida es al amor.

Hoy que cumplimos nuestro primer mes juntos oficialmente, pero 3 meses, 90 días (si, sigo contándolos por si te lo preguntas) compartiendo una infinidad de momentos puedo decir que verdaderamente no hay nada que pueda definir lo que han sido estos 90 días para mí. Y 90 días me suena poco porque parece que te conociera de una vida, parece que eternamente estuviste aquí, parece que nunca me abandonaste. Ha sido un mes fantástico a tu lado pero a la vez difícil porque por una o por otra razón nos ha tocado estar más lejos que cerca, más separados que unidos. Incluso hoy que deberíamos estar juntos celebrando, estamos separados.

Sin embargo tengo la necesidad de creer, porque de no ser así nada tendría sentido, que estas pruebas solo nos ayudan a fortalecernos y nos enseñan a querernos a pesar de la distancia, a pesar de la ausencia, nos dan la seguridad de que el otro siempre estará ahí a pesar que nos separen días o kilómetros. En estos 30 días han pasado demasiadas cosas. Al fin pude conocer a tu buena familia y confirmar de porque tú eres la clase de mujer que eres, de esas que realmente ya no existen. Lo cual para variar me hace unos millones de veces más afortunado que de costumbre. Conocí a tus amigas, hemos salido con ellas (creo que me fue bien). Conocí a la gente de tu trabajo, tal vez ahí no me fue tan bien pero espero que se pueda mejorar ese punto. Te enfermaste, me enferme, te compraste tu carro, conociste a mi padrino, me robaron el celular, fuimos a comer anticuchos a grimanessa, vimos a los juanelos. En resumen hemos pasado a pesar de todo 30 días espectaculares, cada momento, cada cosa que parece sin importancia, cada momento que parecería pasar intrascendente, contigo se vuelve algo súper especial para mí y eso es algo que pienso seguir cuidando en esta relación. Que cada momento contigo sientas que para mí tiene valor, que es lo que espero cuando acaba el día o cuando acaba la semana y que pase lo que haya pasado en el día no hay día malo para mi si acaba con tu compañía.

No debe ser fácil o no debería ser fácil para nadie celebrar este tipo de fechas con 4,000 km de distancia en el medio, sin embargo le encuentro mucho sentido celebrar hoy con una sonrisa en la cara y con mi mejor esfuerzo en señal de agradecimiento porque a pesar de todo estás conmigo y lo siento y lo sé.

Finalmente espero y pido que este sea el primer mes de muchos más a tu lado, mientras tenga que ser y hasta que tenga que ser. Te adoro.

Edu








lunes, 25 de abril de 2016

De inicios, finales e inciertos.... (2 de los mejores)

Hay cosas en la vida que son muy difíciles de entender. Hay cosas que a pesar de que se entiendan pueden llegar a ser muy inciertas. Hay cosas que son inciertas y que aun siéndolo tanto nos regalan certezas tan grandes que vuelven todo lo demás incierto. Hay momentos que valen todo lo que pasaste para vivirlos y hay vidas que todavía siguen esperando a esos momentos.

No puedo sinceramente describir hoy con palabras que eres tú para mí pero eres un poco de todo lo he escrito arriba. Eres un poco difícil de entender, eres un poco incierta cuando te entiendo y aun siendo así de incierta sabes cómo poner mi mundo de cabeza, sabes cómo mirarme cuando quieres algo, sabes calmarme cuando estoy colérico, sabes cómo abrazarme cuando me haces falta, sabes acompañarme en silencio, sabes cómo guardar mis secretos, sabes calmar mis miedos, sabes ser lo que necesito y sabes necesitar lo que te ofrezco.

Eres eso que hace 60 días definitivamente no buscaba pero que tal vez y sin saberlo necesitaba. Y yo espero ser para ti eso que buscas y necesitas. Espero sanar esas heridas que sin saberlo te hicieron y espero poco a poco ayudarte a recobrar la fe, la fe en los sueños, la fe en el otro. La certeza y razón de que cualquiera puede ver lo que veo hoy en ti, de que eres valorable por el simple hecho de ser tu y de que no hay persona más maravillosa que tu. Porque si llegará el día en que no te quieras tanto, en que no creas tanto ti, en que subestimes quien eres, estaré yo siempre firme recordándote que para mí, que en mi mundo no existe nadie mejor que tu. Estaré yo creyendo hasta el último momento en tus sueños, en tus logros, en ti.

Esto es muy cortó solo para agradecerte una vez más que te hayas cruzado en mi camino y que hayas dejado que yo me cruce en el tuyo. Te lo dije desde el principio y lo repito hoy. Soy muy afortunado de tenerte en mi vida, encontrarte ha sido una genial coincidencia pero descubrirte, ese ha sido un regalo inmerecido.

Hoy, 60 días después, celebremos. Celebremos que este día sin saberlo nos marco de maneras increíbles, que marco un inicio y a la vez algunos finales. El inicio de los dos por el final de las soledades.  Feliz 26 KLCR!






sábado, 26 de marzo de 2016

Rescribiendo los 26.....

Hace mucho, demasiado tiempo que no me siento a escribir. Siento que tal vez he olvidado ciertas cosas, que tal vez no me puedo comunicar con la misma naturalidad que antes solía hacerlo cuando me sentaba frente a un teclado.  Sin embargo necesito intentar decirte algo.

Sabes que para mí los días como hoy no eran fechas fáciles, porque de alguna manera me recordaban lo doloroso que puede ser el desamor, la falta de consideración, como puedes llegar a sentirte infravalorado, no respetado, olvidado, o en palabras más sencillas simplemente echado a perder. Sabes también que cuando empecé a hablarte de “amor”, de “cariño”, cuando quise que sacaras esa barrera de amistad que había entre tú y yo, lo hice siempre cuidando que quede claro que yo no buscaba algo más, algo planeado, algo proyectado. Y tal vez intente jugar con tu mente y tal vez pude presentarme como lo que querías que me presente buscando así que puedas aceptar mi manera de ver las cosas. Hoy no tengo más términos ni condiciones que presentar, hoy los rebatiste todos.

Hoy, aun hoy después de 30 días a tu lado tengo unas cuantas cosas que decirte. Primero que todo gracias, gracias por ser tu pero mucho más importante que eso gracias por dejar que lo descubra, por dejar que llegue a lugares de tu mente donde casi nadie ha llegado, por darme miradas en las que me podría ahogar, por darme sonrisas que no quisiera que se acaben. Gracias por reescribir sin querer conmigo esta fecha y corroborar mi fe de que efectivamente la vida se encarga muchas veces de enderezar las cosas en formas y maneras completamente inesperadas. Gracias por ser tu, tan igual a mí y tan diferente a la vez en tantas cosas porque me enseñas que se puede querer de mil maneras distintas y que aun así puede y debe ser espectacular.

Te lo dije al principio, y te lo repito hoy. No le tengo miedo al dolor, si el camino a ese dolor pasa por tus manos, tus abrazos, tu sonrisa, tu manera de quererme tan sincera, tu inocencia, tu inexperiencia, esa manera en la que caes voluntariamente en mis juegos sabiendo muy dentro de ti que podrías zafarte de ellos, pero no quieres. La vida nos pone siempre en el lugar correcto, y no se por cuanto, ni para que, ni porque, pero hoy tu eres el lugar en donde quiero estar. Hoy quiero descansar en tu sombra, hoy no quiero nada más. Te admiro y te quiero por todo lo que eres, una gran hija, la mejor profesional, una buena hermana, una amiga siempre lista, una chica sencilla, una tía chocha, y para mí una gran compañía. Y esa admiración es la que me hace darme cuenta que ese 26 rescribí la historia y elegí bien.

Los días seguirán su paso, y ciertamente no sé lo que vendrá en el camino para ti ni para mí. Solo sé que a donde quiera que nos lleve siempre recordare que un día me miraste así, que hubieron días que no podía despegarme de ti, y que hubo un tiempo en el que no había nada mejor que eso. Katy, gracias otra vez por ti y por la nueva tinta con la que rescribo los 26, una nueva, una mejor, una indeleble. Te quiero gorda.


PD: Feliz 26!

martes, 14 de febrero de 2012

Familiarmente Natural

Como una inyección de ganas, eso son ustedes en mi vida. Como una droga inmaterial que me llena y me reconforta. Con ustedes no tengo miedo de ser quien soy, los defectos no los escondo y mis sonrisas no son sonrisas “para la foto”. Con ustedes los insultos no hieren, las verdades no duelen y las mentiras no matan porque no hay mentiras que esconder.

Son una de las cosas más grandes que la vida me ha dado y solo la misma vida sabe porque no estamos lo cerca que quisiéramos el uno del otro, pero es la misma vida la que sin que nos lo propongamos nos regala días y momentos tan valiosos como los que nos ha tocado vivir en este último mes y más intensamente en esta última semana.

Agradezco profundamente cada día que he podido pasar a su lado, cada momento, cada risa, cada caricia, cada beso, cada mirada, cada renegada, cada papelón en la calle, cada palabra que pude escuchar directamente de sus bocas. Creo que saben lo importante que son para mí y si no lo saben se los digo ahora y son así de importantes porque el lazo que tenemos nosotros es tan grande y tan lindo porque muchas otras familias en nuestra situación se hubieran separado terminando por hablarse de vez en cuando y no importando mucho si es que había oportunidad de juntarse o no, siendo unos perfectos desconocidos que se ven una vez cada año, o cada dos. Pero nosotros no, nosotros nos preocupamos el uno por el otro diariamente. Tenemos nuestras prioridades y tareas diarias pero estoy seguro que en algún momento del día pensamos en nosotros y en como estaremos y deseamos que todo esté bien, particularmente yo siempre lo hago no tengo un momento particular en el día para hacerlo pero siempre lo hago al menos una vez.

Con mi familia por parte de mamá las cosas nunca han podido ser así porque existe demasiada mala fe y envidia de por medio y cuando nos veo a nosotros no entiendo el porqué todas esas cosas se dan por el otro lado.

Esto no es algo muy largo porque no quiero aburrirlos ni aburrir a nadie que pueda leer esto, pero solo escribía para decirles que los amo mucho, que son mi razón para seguir todos los días, que vivo y lucho diariamente con la esperanza que días como los que hemos pasado se puedan repetir y sé que será así porque me lo he propuesto. Que siempre van a poder contar conmigo para lo que sea y que espero verlos muy pronto otra vez, que la vida nos regale esa oportunidad de abrazarnos otra vez, fuerte muy fuerte. Porque con ustedes el cariño sale a flor de piel y es algo natural, familiarmente natural.

domingo, 1 de enero de 2012

Adios 2011.

Adios 2011. Hace un año empecé a escribir en este blog que me ha traído pequeñas pero significativas satisfacciones y lo empecé con un post que hablaba un poco de empezar nuevas cosas en un año nuevo, de borrar lo del pasado año y pedir solo cosas buenas para el año que venga.

Y este año 2011 no ha sido precisamente el año de las “cosas buenas” , tampoco es que haya tenido solo cosas malas pero ese es exactamente el punto al que quiero llegar. Me di cuenta que pedir cosas buenas y esperar que los años que empiezan sean así de “perfectos” es un poco ingenuo  - y con eso no quiero ser matailusiones- porque pues ¿Qué cosa es perfecta? Ninguna!.

El año así como las personas y las cosas va a tener cosas buenas y malas y el punto asumo yo, está en disfrutar las buenas a morir y aprender de las malas. No preguntarse el porqué de las cosas sino el “para que”. Porque es mucho más fácil pensar que todo sucede no por algo sino “para” algo, es más fácil encontrar la consecuencia que la causa. Por ejemplo algo sucede para que aprendamos algo, para que nos hagamos más fuertes, para que recordemos algo que nuestra alma en el camino olvidó. 

Haciendo un resumen de mí año pues en lo laboral conseguí un trabajo que estuve luchando harto. En el ámbito académico Por fin me gradué y tuve mi ceremonia que fue un momento que esperé por largo tiempo, más que nada porque quería que mis viejos me puedan ver en ese momento y, diré que ver sus caras de orgullo ese día fue algo invaluable para mí, tal vez eso fue lo mejor del año.

Mi ámbito personal estuvo un poco más golpeado este año. Mi abuelito querido tuvo que partir después de largos 90 años de vida y 23 de ellos dedicados a mí. Fue un momento durísimo no solo por el dolor de la partida sino por el hecho de ver a mi mamá muy golpeada y triste. Pero agradezco el tiempo que la vida me lo presto, fue el mejor abuelo del mundo.  Por otro lado, conocí a una persona que pensé era especial y buena y he de decir con la joda de saberme en yerro que me equivoque de la peor manera. Resultó ser una persona sin escrúpulos para mentir ni para usar a la gente pero lamentablemente no le puedo echar toda la culpa a ella porque yo también pequé de negligente al ignorar todos los defectos que me daba cuenta que tenía, probablemente como dicen cuando uno está enamorado se ciega. A la vez al descubrir mi error con esa persona lo descubrí con otra persona, al que yo consideraba de mis mejores amigos. Un “broder” con quien había compartido largos fines de semana de trago inacabable, charlas de la vida con un par chelas en mano, decepciones, logros, estudios, momentos familiares. Por todo eso jamás esperaba una agresión o un daño de su parte pero bueno, llegó. Y con eso me di cuenta que había estado jodidamente equivocado y que él nunca me considero en verdad su amigo, que nunca tuvo lealtad conmigo y que probablemente no la tenga con nadie. Probablemente es feo perder a la chica de la que estas enamorado y probablemente es feo perder a un amigo o un “mejor amigo” pero perder las dos cosas a la vez es en verdad desconcertante, lo puedo decir. Con lo que paso pensé hasta en empezar a desconfiar de todo el mundo, pensé que ya no podía confiar en ninguna mujer que diga estar enamorada ni tampoco en ningún amigo que jure lealtades a morir. Hoy sé que no es el camino pero no puedo decir cual sí es. Lo único que sé ahora es que hay lobas con disfraces de corderos y falsos amigos en todos lados y hay que ser mucho más cuidadoso con eso.

De lo bueno, este 2011 ha sido el año para ver a muchas personas importantes que están lejos. Un par de amigos del colegio que están lejos hace mucho, vinieron de visita y no he perdí la oportunidad de verlos. Mi familia que está en Chile también vinó. También un par de familias muy importantes para mi se acercaron pues se mudaron a mi distrito, ahora es mucho más fácil verlos y podré hacerlo más seguido. Me refiero a la familia de mi hermano Andreí y a la familia de mi mejor amiga Gabriela. Me alegra mucho que estén cerca.
Una de las mejores cosas para mi personalidad enamorada de la música de este año fue el poder ver a una leyenda de la música en vivo en un escenario. Me refiero al gran Paul McCartney, definitivamente el mejor show del año y probablemente uno de los mejores de mi vida. Escuché canciones míticas con una onda espectacular como “A day in life” escuchar esa canción en vivo de la voz de uno de los que la compuso es otra cosa.

En fin, si tengo que hacer un balance de este año que pasó, la verdad no podría etiquetarlo ni como bueno, ni como malo. Creo que tuvo cosas espectaculares y pruebas que he tenido que superar pero si tengo en cuenta que de todo he aprendido tal vez eso inclina un poco la balanza.

Esta vez no pediré que este 2012 sea excelente y que todo sea felicidad porque como dije arriba sería una petición inútil. Pediré aprender a ser feliz con todo lo que pasé, disfrutar a morir las cosas buenas, ignorar las cosas malas, alegrarme y enorgullecerme de mis logros, luchar contra mis frustraciones, elegir bien a las personas a las que les doy mi confianza, cariño y las hago parte de mi vida y sacar de mi vida a quienes no merecen estar en ella. Aprender a reconocer cuando me están dando amor en vez de cuando solo me están dando migajas. Y aprender a dar amor a montones no solamente a la persona especial sino a todo el mundo que lo necesite y lo merezca. Y es lo mismo que deseo para todos, hagan sus sueños realidad, sonrían todos los días, hagan cosas que los apasionen este 2012 aparte de sus estudios o trabajos. Y sean felices. Gracias por todo. 

jueves, 15 de diciembre de 2011

Despues del infierno....

Hoy voy caminando otra vez en el viento, en las aguas, en la tierra en todos los elementos.
Renazco de las cenizas en donde me dejó aquel fuego hirviente, pero las cicatrices no se van. Abro los ojos, respiro nuevamente, aire fresco, aire limpio, pero las cicatrices no se van.
 
Me muevo lentamente, estiro mis músculos, miro a mi alrededor, pero el miedo no se va.
Sonrió como una mueca, como un gesto disforzado, la confianza quiere llevarme, pero el miedo no se va. Reviso en el fondo de mi alma, en los planos más escondidos y sigue ahí todo el dolor, toda la mierda. Cuánto daño hacen las palabras, cuanta desolación dejan las promesas rotas, las mentiras calculadas.
 
No se trata de las defensas que regale, no se trata de las armas que entregué en mi capitulación.
Se trata de aquel juego inhumano, en el que una apariencia pesa más que una verdad.
Se trata de la irresponsabilidad de la persona que dispara la bala, de la cobardía o incapacidad de aceptar un error. Se trata de aquella ligereza asesina de los juramentos eternos en donde la eternidad dura lo que duran los encuentros. En donde el amor y la pasión no se diferencian, y en su intempestad se llevan a todo a su paso.

No se trata de lo que dije o hice mal, no se trata de mis errores o mis omisiones. Se trata de la frivolidad de un mundo donde la humildad no encaja, donde la posición y el dinero mandan. Se trata de la falsa moral, la falsa fe y las falsas oraciones, de la hipocresía hasta con Dios. Se trata de las ganas de dañar, del desquite del destino, de cobrarse con alguien más lo que la vida te hace.

Quien te prometa que jamás te hará daño, es quien más daño te hará porque quien no tenga intenciones de hacerte daño no necesita de promesas ni juramentos para probártelo ni para convencerse de aquello, necesita de sus acciones que deberian evitar las heridas del alma. Las heridas del alma indudablemente son incurables, no dejan nunca de sangrar ni de filtrar la materia del dolor, la frustración o la pena.  La profundidad y el daño de una traición es proporcional a cuanto querías o amabas a la persona que lo hace.

Y las cicatrices no se van, y el miedo no se va, y las decisiones por mucho que duelan se tienen que respetar porque la vida se reduce a eso, a las decisiones que tomas y en como estas afectan el futuro y el de las personas que caminan a tu lado y en cuanto bien o cuanto daño hacen esas decisiones. Y mi decisión es seguir adelante, porque si el miedo sigue aquí y las cicatrices no se borran, la esperanza tampoco, MI esperanza tampoco.





Esta canción siempre me levanta el animo y me devuelve un poco la esperanza. Funca.