Hoy definitivamente no es fácil para mí escribir, sé que no
es mi mejor día y se de sobra que tampoco lo es para ti. A pesar de todo, no
hay ningún estado de ánimo ni circunstancia que me pueda impedir cumplir con
este rito que ya es una tradición para mí y sé que tu ya lo esperas cada 26.
Que te puedo decir? No ha sido un mes fácil, vaya que no.
Pero en todos los días desde que este mes inicio puedo decir que estuve
pensando en ti. Sabes que no he ido a trabajar y hace una hora estoy leyendo
nuestras conversaciones en whatsapp de hace un mes atrás. E incluso hace un mes
tenía todos esos pensamientos dañinos que ya solté e incluso en esos momento
luchabas con una entereza única para que no te afecten, para que no nos
afecten.
Te agradezco mucho cada gesto, cada vez que ignoraste mis
estupideces, cada vez que no le diste cabida a mis miedos en tu corazón. Te
agradezco esa fe en esto, en nosotros, en mi. Te agradezco haberte dado desde
el principio de una manera diferente a la mía pero probablemente muchísimo más importante.
Porque es cierto tal vez te faltan detalles, tal vez ganas, tal vez tiempo,
pero la manera en que todo este tiempo has aguantado mis bombardeos es
realmente admirable y no solo admirable sino realmente conmovedora.
Definitivamente no lo merezco. Merezco que hace tiempo te hayas cansado de mi y
de mis flagelos, merezco que hace mucho hayas decidido buscar algo mejor,
merezco que me hayas dejado solo porque parece que eso es lo que quisiera al
final.
Pero como el amor no conoce de merecimientos entonces tu has
decidido regalarme algo que tal vez en un momento merecí pero que claramente
hoy es algo que no debería tener.
Hoy quiero pensar que puedo volver a ser ese Eduardo que te
ilusiono y que te hizo abrir las puertas del corazón. Hoy quiero convencerme
que puedo volver a confiar, que puedo volver a creer en que merezco el amor de
alguien tan maravillosa como tu. Hoy mi única razón para seguir peleando es
pensar que puedo volver a regalarte momentos bellos, únicos, mios, de ambos.
Hoy tengo la esperanza de poder borrar a besos tantas lagrimas, hoy tengo la
idea de abrazarte fuerte hasta que entiendas que no me voy a ir de tu lado. Hoy
quiero agradecerte porque cuando pensé que era yo quien iba a enseñar, termine
recibiendo una lección más grande que cualquier cosa o gesto que yo haya podido
tener contigo.
Es cierto que no tengo idea como volver a esos momentos
aunque sean momentos muy cercanos. Pero
tal vez sin pensarlo mucho y sintiéndolo mucho más podre seguir a mi corazón y él
me dirá cual es el camino de vuelta al tuyo.
Perdóname por todos los errores, perdóname por mis
omisiones, por todo lo que digo y hago que nos aleje en vez de acercarnos. Te
pido con el corazón en la mano y con las lágrimas que mojan mis manos mientras
escribo que me des una última oportunidad, que creas una vez más, que apliques el borron y cuenta
nueva no en tu memoria sino en tu corazón y que me veas como me veías esas
tardes en el malecón, con esa mirada que me decía que te fascinaba.
Te amo
katerine, y espero poder seguir teniendo el privilegio de amarte por muchos años
más. Por más atardeceres y amaneceres a tu lado, te amo gorda! Se que es difícil de decir, pero es lo único que me parece
puedo decir alegre hoy. Feliz 26!!! Un día más para recordar porque empezó todo
y como y cuanto creció. Nunca me cansaré de decir que tu eres lo máximo y yo solo tengo demasiada suerte! Te amo!
Siempre y sinceramente tuyo,
Edu